El testimonio del obispo Gabriel Escobar es el retrato de lo que está ocurriendo en uno de los puntos más remotos de la geografía del Paraguay: las precarias vías de comunicación de los poblados están completamente bajo agua, por lo que es imposible el tránsito en todo el departamento.
En contacto con ULTIMAHORA.COM, el religioso comentó que la situación es desesperante, teniendo en cuenta que los alimentos llegan solamente a través del barco Aquidabán.
Señaló que la incomunicación ya dura tres meses por lo que requieren con urgencia la ayuda de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN).
“Nosotros pedimos a las autoridades soluciones a largo plazo. Estamos completamente invisibles. Necesitamos caminos de todo tiempo”, indicó Escobar, al tiempo de agregar que todavía no se realizó el desembolso para ayudar a uno de los departamentos declarados en estado de emergencia por el Congreso Nacional.
Las comunidades más afectadas son las indígenas, en especial la parcialidad de los Chamacocos, quienes se resisten a abandonar sus viviendas.“El agua entra a las chozas y con este clima frío están comenzando a brotar las enfermedades”
, apuntó.Los interesados en brindar algún tipo de ayuda al Alto Paraguay pueden contactar con el Obispo Gabriel Escobar al número: 0981 – 842 066.