El puesto policial ubicado sobre las calles Yvy’a y Ñandutí, y que está a cargo de la Comisaría 16ª Metropolitana, estaba siendo ocupado por el suboficial Rubén Flores, que se vio sorprendido por la llegada de dos hombres que le robaron su arma reglamentaria, un revólver calibre 38.
A 30 metros del lugar se encontraba el suboficial Estanislao Ferreira, que vio lo ocurrido y fue a auxiliar a su compañero y allí se produjo un intercambio de disparos.
De acuerdo a la versión del comisario Julio Melgarejo, jefe la Comisaría 16ª, los asaltantes dispararon a matar a los uniformados, pero afortunadamente ninguno de ellos fue herido de gravedad. Los hombres, tras robar el arma, huyeron a bordo de un automóvil de la marca Toyota Platz y se presume que uno de ellos habría quedado herido en la balacera.
El comisario Melgarejo expresó que el suboficial Ferreira tuvo la oportunidad de disparar directamente contra los asaltantes, pero que este tuvo temor de ser acusado posteriormente de ser un policía gatillo fácil.

El jefe policial sostuvo además que hasta el momento no se tienen novedades de los autores del hecho, pero que se está intensificando la búsqueda de los mismos.