El menor violaba a dos hermanastras de 9 y 11 años; incluso, el abuso llegó a ser presenciado por una testigo. La fiscala solicitó la pena máxima de 8 años de prisión, pero no pudo convencer a los magistrados.
El juicio culminó en la tarde de ayer, en el Tribunal Penal de Ciudad del Este y estuvo presidido por Blas Cabriza e integrado por Graciela Flores y Evangelina Villalba Montanía, quienes decidieron condenar al menor infractor a una pena mínima. Para la representante del Ministerio Público, se demostró que hubo coacción sexual y abuso sexual en niños.
Las niñas también eran abusadas por el padrastro, quien está procesado en otra carpeta fiscal por los mismos hechos. El caso fue denunciado el 4 de diciembre del año 2013 por vecinos de las víctimas, domiciliadas en el kilómetro 14 Monday, del distrito de Minga Guazú.
La agente fiscal pudo confirmar que la madre de las víctimas también conocía del hecho, pero no lo denunció porque sufría amenazas de muerte por parte de su concubino, quien le decía que la mataría a machetazos si denunciaba el crimen, según la representante del Ministerio Público.

Durante la audiencia pública una tía declaró como testigo del acusado y dijo que una vez pudo observarlo cometiendo el hecho. Pero aún así, el menor podrá cumplir la condena en libertad, atendiendo a la sentencia definitiva (E. M.)