Luis Flecha, vocero del CDP y miembro del Partido Paraguay Pyahura (PPP), indicó que llegaron a realizar varios actos en estos días de recordación para no dejar que la memoria de los caídos muera, enfatizando que la problemática de la lucha por la tierra no es solo un problema del campesinado, sino que afecta al desarrollo nacional.
“Se cumplirán cinco años de la mayor masacre en nuestro país de la lucha por conquistar una tierra para el pueblo paraguayo. Consideramos que no hay que olvidar este acto, que sea ejemplo de resistencia y lucha en defensa de la soberanía”, indicó Flecha.
Insistió en que no hay que olvidar que quienes condenaron a los campesinos son los verdaderos culpables de la masacre de Marina Cué, ya que los condenados la única culpa que tenían era de querer un pedazo de tierra.
Lo importante para los del CDP es demostrar y contar a todos sobre lo que ocurrió el 15 de junio de 2012, donde se produjo la muerte de once campesinos y seis policías. Recordar que Marina Cué, que pertenece al Estado paraguayo, fue usurpada por la firma Campos Morombí, de la familia Riquelme, y son los que solicitaron el procedimiento policial que derivó en la masacre.
Aquel procedimiento policial se ordenó desde el Ministerio del Interior, con Carlos Filizzola al frente, y cuando el comandante de la Policía era Paulino Rojas.