Familiares, amigos, activistas y políticos llegaron en la tarde de este sábado hasta el cementerio de la Recoleta para dar el último adiós a Luis Alfonso Resck, quien falleció este viernes a los 92 años de edad.
La senadora Esperanza Martínez fue una de las personas que brindó unas breves palabras antes de sepultar los restos de Luis Alfonso Resck. Resaltó la coherencia que mantuvo durante su vida con la lucha por los Derechos Humanos.
“Así como existió la dictadura, los profanadores de la democracia, también existió el profesor Resck, quien mostró a los paraguayos que se puede ser coherente toda la vida”, expresó al tiempo de recordar que fue víctima de una dictadura oscura y terrible.

Alfonso Resck es reconocido por su incansable lucha por los Derechos Humanos durante la dictadura de Alfredo Stroessner.
Estuvo unas 109 veces en la cárcel o comisarías stronistas en los 35 años que duró la dictadura, con frecuentes torturas y el mote de “comunista y subversivo”, calificación que significaba en aquella época la pérdida de todos los derechos.
Fundó la Comisión Nacional de Derechos Humanos en 1964 y luego fue también fundador del Partido Demócrata Cristiano (PDC).
Sufrió el exilio en 1981 cuando, luego de cuatro días de huelga de hambre estando en prisión, fue deportado a la Argentina.
Su incansable tarea como activista a favor de los DDHH y su labor docente y de luchador por las causas sociales le valió a Resck varios reconocimientos a nivel nacional e internacional.
Fue propuesto como candidato al Premio Nobel de la Paz por sectores de la sociedad nacional e internacional, como por la Universidad Por la Paz, de Buenos Aires, Argentina.
En el 2009 se integró como miembro titular del Consejo Nacional de Educación y Cultura de la Nación. Años más tarde, en el 2014, el Vaticano reconoció su trayectoria.
Además de la persecución, prisión y tortura, Resck sufrió otra consecuencia, ya que, pese a su prolongada vida como docente, jamás pudo acogerse a la jubilación.
Ello debido a que sus documentos fueron quemados durante la dictadura de Alfredo Stroessner, haciendo desaparecer su legajo de servicios en el Ministerio de Educación e imposibilitando su justo retiro laboral.