Elías Cabral | Canindeyú
La estructura de madera, cuya dimensión es de 6 x 4 metros, está bastante deteriorada. Las vigas y los tablones cedieron con el tiempo por el paso de vehículos pesados.
El puente es muy peligroso para quienes circulan por la zona, según las denuncias de los habitantes.
La pasarela es utilizada por los automóviles o camiones que transitan por la comunidad conocida como Tava’i, a unos 25 kilómetros al noreste de la ciudad de Curuguaty.
Las comunidades de San Blas, Garay Cué y varias colonias indígenas también utilizan frecuentemente el puente.
Igualmente, camiones transportadores de mercaderías y productos agrícolas pasan a diario y afrontan el peligro del puente en deplorable estado.