El 17 de setiembre de 1980, alrededor de las 10 de la mañana, el exdictador nicaragüense Anastasio Somoza Debayle fue ajusticiado por un comando del Ejército Guerrillero del Pueblo (ERP), durante un atentado registrado sobre la avenida España (que en ese tramo se llamaba Generalísimo Franco), casi Venezuela, en Asunción.
Somoza había huido de su país tras el triunfo de la Revolución Sandinista y fue acogido como exiliado por el también dictador Alfredo Stroessner. Vivía lujosamente en una mansión, sobre la avenida España, junto con su mujer, la ex reina de belleza Dinorah Sampsom.
Según se supo mucho después, un comando del ERP, dirigido por el líder guerrillero argentino Enrique Gorriarán Merlo, había ingresado en forma clandestina al Paraguay, para preparar el plan de ataque.
Tras varios días de vigilancia, montaron una emboscada desde una vivienda alquilada a nombre del cantante español Julio Iglesias. Detuvieron el lujoso auto Mercedes Benz en que viajaba el ex mandatario nicaraguense con fusiles de asalto M-16 y luego le dispararon con un lanzacohetes LPG-2. En el atentado murió Somosa, su asesor financiero Jou Baittiner y el chofer César Gallardo.
El asesinato causó una gran conmoción y colocó al Paraguay en el foco de la información mundial. Periodistas y fotógrafos de Última Hora llegaron al sitio pocos minutos después del ataque y recogieron en tiempo récord todas las aristas del suceso, en una edición especial que salió a la calle después del mediodía y se agotó en pocas horas.
Esta es la foto que se publicó en portada, con un gran titular: Mataron a Somoza.