La fotografia fue tomada por Marc Seller, fotógrafo del periódico Jerusalem Post, durante una cumbre entre la canciller alemana y el primer ministro del Estado israelí, hace ya unos meses, pero recién este lunes estalló en las redes sociales, en internet.
En la imagen, el primer ministro señala algún punto con el dedo a la canciller, de manera tal que su dedo proyecta una pequeña sombra sobre los labios de Merkel, quien aparece retratada como si luciera el clásico bigotito que se volvió un ícono en el rostro del tristemente célebre dictador alemán Adolf Hitler, acusado de haber causado la segunda guerra mundial, y del genocidio de miles de judíos.
“Es mala sombra que persigue a Merkel y a Netanyahu”, señala uno de los miles de post que se comparten en la red, junto con la ahora famosa foto.
“La canciller alemana, Angela Merkel, tiene especial mala suerte en sus apariciones públicas. Muchos recuerdan cómo en 2005 se quedó con la nalga al aire, literalmente, al ser fotografíada por la espalda y a traición cuando se cambiaba su traje de baño en una playa. Ahora, se ha hecho realidad la peor pesadilla para un primer ministro germano: Aparecer en una foto con el bigote de Hitler. Y nada más y nada menos que en Israel, donde se encuentran muchos descendientes de las víctimas del holocausto nazi. La “tormenta perfecta”, recuerda el diario El Correo, de España, en su sitio web.