La desaparición de Lucilo Nicolás Cardozo fue denunciada por su esposa, Lourdes Aveiro, el pasado martes. La mujer manifestó a la Policía que Martínez recurrió a los servicios del abogado.
Aveiro perdió contacto con su marido cuando este viajaba con rumbo a Encarnación, Departamento de Itapúa, en compañía de Martínez. El rodado del desparecido fue encontrado en la vivienda del ahora detenido.
El presunto implicado en el hecho manifestó a la Policía que, supuestamente, recibió USD 10.000 por parte de un narcotraficante de la zona de Salto del Guairá, Departamento de Canindeyú, de nombre Santiago Godoy, para acabar con la vida del abogado.
El sospechoso es quien indicó a los investigadores dónde ocultó el cuerpo del abogado, pero negó haberlo matado. “Yo no le maté, otra persona le mató. Una persona ligada al narcotráfico, de Salto del Guairá. Ellos trajeron el cuerpo y después me pidieron que tape todo”, dijo a Telefuturo.
Una comitiva policial y fiscal se trasladó hasta un inmueble de la ciudad de Yaguarón, Departamento de Paraguarí. En el lugar realizan excavaciones para hallar los supuestos restos de la víctima.
El detenido dijo que fueron ocho las personas que le pidieron esconder los restos del abogado. Indicó que los mismos lo amenazaron con atentar contra la vida de su hija. “Pido protección para mi hija”, señaló el sospechoso.
Martínez habló sobre vínculos entre los narcotraficantes y el abogado asesinado. Indicó que existía un problema de mucho dinero entre las partes.
Agustín Martínez, alias “Soldado Israelí”, fue acusado en el 2009 por el crimen del político carapegüeño Ricardo Cabello y de sus empleados Hilario Marecos y Alberto Medina, y la posterior incineración de los cuerpos en un horno de carbón.
El triple homicidio se había producido en la compañía Isla Alta, de Ybycuí, Departamento de Paraguarí. El hombre recuperó su libertad en el 2015 tras recurrir a un habeas corpus reparador.