La víctima fatal fue Severiana Acosta de Paredes, de 63 años, quien había salido de su vivienda para mirar los pesebres del barrio en ocasión de los Reyes Magos pero, llamativamente, ya no regresó. Su cuerpo fue encontrado en la mañana del sábado pasado al costado de un camino vecinal de la compañía Zayas, de Yaguarón.
La madre del menor que confesó el crimen dijo que ella fue quien convenció a su hijo para que se entregue a la Policía Nacional. Sostuvo que su hijo manifestó que actuó bajo amenazas de muerte. Indicó que un grupo de amigos que tiene lo obligaron a cometer el feminicidio.
El propio adolescente de 16 años confesó el crimen en una carta que la madre entregó a los investigadores. Incluso, ella lo encontró cuando el mismo se disponía a dejar el texto en la casa y darse a la fuga nuevamente.

La amenaza también afectaba a sus familiares, por lo que se vio obligado a actuar de esa forma, según la madre. La víctima fatal también sufrió violaciones pero, de acuerdo con la versión de la madre del autor, este no mencionó nada al respecto.
Indicó que su hijo se juntó con un grupo de gente que lo está destruyendo. “No son personas buenas, nadie habla bien de ellos tampoco”, lamentó.