El hecho que llama la atención a los legisladores es que, a través de la compra de varios medios, el gobernante puede influir en la generación de noticias, presentando un panorama que no coincida con la realidad, tratando de presentar “una verdad única”, y acallando las críticas.
Sobre este punto, el senador colorado Arnoldo Wiens subrayó que la acumulación de medios “es algo que preocupa”, porque “se puede utilizar políticamente”.
Admitió que en los medios “amigos”, los candidatos afines tendrán más espacio para las entrevistas y la promoción de sus propuestas, frente a sus adversarios.
El legislador subrayó que, sin embargo, es la ciudadanía la encargada de dar veracidad a las diferentes versiones que son publicadas por los medios mencionados.
Manipulación. A su vez, el senador de Avanza País Adolfo Ferreiro subrayó que la acumulación de medios en un solo sector puede usarse como “herramienta de manipulación de la opinión pública”.
Indicó que otro peligro es que a través de los medios propios se puede ir generando una “voz única”, que no permita a la ciudadanía acceder a la verdad sobre los temas más candentes, ya sea de la política como de la economía.
Sin embargo, Ferreiro señaló que la intención de los políticos de acumular medios de comunicación es algo que se da en varios países de la región.
Recordó que décadas atrás, cada sector político, gremial e incluso estudiantil, contaba con medios propios para difundir sus ideas políticas. Sobre ese punto, el senador del PLRA Luis Alberto Wagner denunció que existe una persecución hacia los medios independientes, especialmente en el interior del país.
Según Wagner, recibió denuncias de que en aparatosos operativos fiscales desmantelaron varios radios comunitarias independientes, en la zona de Curuguaty.
“Utilizan a los fiscales, a la Conatel y a la estructura del Estado para perseguir a esas radios”, indicó.
Wagner subrayó que “sin embargo, los medios alineados al cartismo siguen operando en similares condiciones a las de las radios clausuradas”.
