Adrián Cáceres
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Hoy, a las 19.00, se lanza una lujosa edición conmemorativa de la novela Yo el Supremo, de Augusto Roa Bastos, con motivo del centenario del natalicio de su autor. La presentación será en la en la Casa Bicentenario de la Literatura, sita en México 346.
La obra incluye un estudio preliminar de Ramiro Domínguez (Premio Nacional de Literatura 2009), y un glosario de Antonio Carmona (presidente de la Fundación Roa Bastos), quienes estarán presentes en el lanzamiento, junto a Bernardo Neri Farina, presidente de la Sociedad de Escritores del Paraguay. Servilibro y la citada Fundación son responsables del material. “Es una edición especial similar a la que habíamos hecho con relación al 40 aniversario de Yo el Supremo”, dice Carmona.
Vidalia Sánchez, directora de Servilibro, adelanta que el libro formará parte de una colección, que también incluirá otros títulos como Hijo de hombre y El trueno entre las hojas. Añade, además, que ya están disponibles los primeros números de la colección Literatura paraguaya en historietas, con obras de Roa, y anunció que se publicará otra colección titulada Vida y obra de Augusto Roa Bastos, con su biografía en cómics. “Los jóvenes, principalmente, quieren leer literatura en formato de cómic”, explica.
Importancia. Sánchez resalta que Yo el Supremo, publicada originalmente en 1974 por Siglo XXI, es considerada la obra máxima de Roa. “Cuando voy a las ferias del libro del exterior lo primero que me preguntan es si tengo ejemplares de Yo el Supremo”, revela.
A su vez, Carmona recomienda leer la obra citando las frases de dos autores que felicitaron al escritor cuando ganó el Cervantes en 1989. “Una carta que le envió Alejo Carpentier decía: ‘Después del Quijote, Yo el Supremo’. La de García Márquez fue un telegrama lacónico: ‘Tú, el supremo’”, recuerda Tony.
Agrega que el español Gonzalo Torrente Ballester, también Premio Cervantes, “cuando presentó la novela de Roa, Vigilia del almirante, dijo: ‘escritores españoles, si queremos aprender Cervantes leámoslo a Roa’”. Son razones de bastante peso para acercarse a Yo el Supremo”, asevera Carmona.
“La obra es muy importante porque es una gran reflexión sobre el Paraguay, sobre temas muy controvertidos, como la dictadura del doctor Francia, el proceso de la independencia (...). Hay que leerla porque es un libro maravilloso y fascinante”, asegura el prologuista.
