Debido a este panorama, muchos pacientes cirróticos con recomendación de trasplante fallecen anualmente y otros optan por una oportunidad de vida migrando a Brasil o Argentina con la fe de recibir el trasplante de hígado. (Ver infografía).
CASO. Tal es el testimonio de Jazmín Quiñónez (27), quien viajó a principios de febrero a Curitiba, Brasil, y el pasado viernes 28 de febrero ingresó oficialmente como paciente del Hospital de Clínicas de esta ciudad y también ya está en lista de espera para acceder a un trasplante de riñón para mejorar su calidad de vida. Actualmente, está siendo sometida a una serie de estudios para conocer su estado.
Al principio de su lucha, viajó a Argentina, pero por la burocracia no pudo conseguir trasplante tras tener residencia durante dos años en la localidad de Formosa y retornó al país. Previamente, seguía su tratamiento en el Hospital de Clínicas de San Lorenzo.
“Mi historia es triste porque ando luchando por mi vida. Todo esto tengo que pasar porque en mi país no hay trasplante de hígado”, lamentó la paciente que padece cirrosis hepática desde los 13 años y que derivó en un deterioro progresivo de su salud.
El desarraigo, la lucha, la falta de apoyo del Estado es la constante para Jazmín Quiñónez durante el proceso de tratamiento y espera por el trasplante de hígado.
SOLIDARIDAD. Debido al alto costo de vida en Curitiba, la paciente requiere de la solidaridad de la gente para costear sus gastos de estadía, pues el tratamiento es gratuito. Logró recaudar USD 5.000 mediante actividades solidarias para su viaje, pero aún requiere de ayuda diaria.
Las personas interesadas pueden depositar el dinero en Visión Banco en la Cuenta Corriente N° 2975908 a nombre de Jazmín Quiñónez y en el Banco Itaú en la Cuenta Corriente N° 72200883/4 a nombre de Luis Quiñónez, padre de la paciente. Más informes al (0971) 941.876.