Antes de asumir en agosto, el Ejecutivo viajó a España y luego a Bélgica. Después, realizó varios viajes al exterior con la sola intención de recomponer las relaciones diplomáticas con los países de la región. Su primera participación fue en la Cumbre de Unasur, en Surinam, en donde tuvo su primer encuentro con su homólogo de Venezuela, Nicolás Maduro. Desde ese entonces, realizó visitas breves de un día. Mantuvo reuniones con su par Dilma Rousseff (Brasil), Cristina Fernández (Argentina), José Mujica (Uruguay), miembros del bloque del Mercosur. También conversó con Sebastián Piñera (Chile). Asimismo, ya hubo contactos con las autoridades del gobierno de Evo Morales (Bolivia) y recomposición con el gobierno de Rafael Correa (Ecuador), con la designación de una representante diplomática.