El alcalde explicó, en entrevista con Radio Programas del Perú (RPP), que “no hay cómo llegar vía terrestre” a varias localidades de Carabaya, donde han reportado “más de 1.200 casas caídas por las heladas”, caminos y trochas cubiertas por casi un metro de altura de nieve.
La capital de Carabaya, Macusani, está sobre los 4.000 metros sobre el nivel del mar y ha presentado temperaturas entre los 13 y 16 grados bajo cero en los últimos días, según informó esa municipalidad a inicios de este mes.
El alcalde provincial añadió que “se calcula que 12.000 cabezas de camélidos” han muerto por el intenso frío, pero que la secuela por las enfermedades y falta de alimento en la zona puede provocar el deceso de un total de 20.000 animales, entre alpacas, vicuñas y llamas.
Puno y otras regiones del sureste peruano son las zonas donde las comunidades campesinas crían estos animales para vender su valioso pelaje, con el que se producen abrigos y mantas.
Gutiérrez pidió al Gobierno central declarar su provincia en estado de emergencia para poder tener recursos económicos adicionales que les permitan atender el fenómeno climático.
De acuerdo a los pronósticos del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), durante esta semana caerá más lluvia, granizo y nieve en las zonas altas y medias de las regiones de Puno, Cuzco, Arequipa, Huancavelica y Moquegua.