Los médicos del Hospital Memorial Scheer de Nepal estaban a punto de almorzar cuando comenzaron a sentir el temblor, sin imaginarse la gravedad de la situación. “Inmediatamente todo el equipo se dirigió al hospital y empezaron a llegar las primeras víctimas”, comentó el profesional paraguayo al periodista de ÚH, Alfredo Martínez.
Ramón Ruiz Díaz dirige actualmente el departamento de cirugía del hospital asiático . Hace siete años que trabaja en Nepal y tiene mucho cariño hacia su gente, por lo que siente el dolor y sufrimiento de los nepalíes a raíz de la tragedia.
El terremoto de 7,8 grados de magnitud en la escala abierta de Richter fue el mayor en 80 años en Nepal. El último recuento oficial de muertos por el sismo superó los 6.200 y el de heridos alcanza casi los 14.000.
“El dolor de esta gente es muy grande, en nuestro distrito hay casi 100 mil casas destruidas y la posibilidad de recuperación económica es sumamente remota”, expresa.
Recuerda que el fatídico día no se registraron derrumbes en inmediaciones del centro hospitalario, pero al recibir a las víctimas comenzaron a trabajar con mucha disciplina y responsabilidad. También tuvieron ayuda del Ejército local y de la Policía.
“Trabajamos sin descanso y montamos tiendas en el patio. La situación era crítica y muchas personas se acercaron a donar sangre; eso fue muy importante”, señala.
Dos cesáreas
El director médico paraguayo ordenó que se lleven adelante dos cesáreas en el patio del hospital a raíz del peligro que representaba estar dentro del edificio. Las mujeres embarazadas necesitaban con urgencia llevar adelante ese procedimiento.
La labor del profesional compatriota y de su equipo médico fue resaltada en una publicación periodística en el portal Deccan Herald.
“Gracias a Dios hemos aprovisionado el hospital. El Gobierno inmediatamente dictó un decreto de que hay que atender sin costo a todos los pacientes. Nosotros los alojamos y les damos la mejor atención posible que está a nuestro alcance”, sostiene.
Si bien considera que son muchos años de trabajo que lleva en ese país, analiza seguir allí por un tiempo más, a pedido de su esposa.
Médico misionero
Ruiz Díaz menciona que ya trabajó en varios hospitales misioneros y, en consecuencia, ya estuvo presente en otras zonas de desastre, como en Haití, durante el terremoto ocurrido en el año 2010.
“Hacemos nuestro trabajo con mucha dedicación”, es la frase con la que el médico valora el esfuerzo realizado para atender a personas que perdieron prácticamente todo a consecuencia de desastres naturales.
En Paraguay también estuvo trabajando en el Hospital Adventista de Asunción.