El proceso comenzará con el llamado a concurso al público para el diseño del billete, para el cual aún no se tiene definido el personaje o en alusión a qué tema será, pero luego de elegirse el diseño se iniciarán los trámites de elaboración del pliego de bases y condiciones, así como de los análisis correspondientes sobre cuántas unidades deberán ser emitidas y en qué plazo, entre otras cuestiones monetarias, explicó González.
Adelantó que el mismo será de algodón, y no de polímero, como es característico en los billetes de alta denominación. En lo que respecta a los costos que demandará, González señaló que dependerá de las medidas de seguridad con las que deberá contar el billete, las cuales deberán ser superiores a las del G. 100.000, considerando que este valor es una quinta parte de lo que sería el nuevo papel.
Actualmente el billete de cien mil guaraníes –con la imagen de San Roque González de Santa Cruz– es el papel moneda de mayor denominación en circulación nacional; además de billetes de dos mil, cinco mil, diez mil y cincuenta mil guaraníes; al igual que las monedas de cincuenta, cien, quinientos y mil guaraníes.
Según los datos del Banco Central, mientras a enero del 2002 los billetes en circulación se dividían en 25% de alta denominación (100.000 y 50.000), 29% de media denominación (10.000 y 5.000) y de baja denominación con un 46% del total (billetes de 1.000), a enero del año pasado, la división era de 42% de alta denominación, 27% de media (incluidos los de 20.000) y 31% los de baja denominación, en este caso, el de 2.000 guaraníes.
Estos datos reflejan el cambio en el cono monetario, de manera que las exigencias del mercado obligan al BCP a emitir billetes de más alta valía.
En cuanto a la cantidad de papel moneda en circulación en el territorio nacional, prácticamente se duplicó, pasando de poco más de 63 millones, en 2002, a 157 millones, en enero de 2012.