Varios edificios del país permanecieron a oscuras en la noche de este sábado para sumarse a la iniciativa mundial que nació en el 2007, en la ciudad de Sydney, Australia. La Hora del Planeta ahora es un símbolo de la lucha contra el cambio climático.
Paraguay se sumó a esta campaña desde el 2009 y este año las principales actividades en torno al cuidado del ambiente se desarrollaron en el Villamorra Shopping, donde hubo shows y bicicletas estáticas. También se proyectaron imágenes, músicas con la orquesta H2O, y bailes.
Unas 20.000 firmas ciudadanas fueron entregadas a las autoridades para pedir el cumplimiento de ley que prorroga hasta el año 2008 la prohibición de tala de árboles y destrucción de bosques de la Región Oriental y de esa forma salvar los últimos remanentes del Bosque Atlántico del Alto Paraná.
La represa Itaipú también suspendió su espectáculo de luz y sonido que realiza cada fin de semana a los turistas.
El apagón recorrió todo el mundo al pasar por las pirámides de Egipto, la Mezquita Azul de Estambul, las ruinas del Partenón en Atenas o del Coliseo romano, la berlinesa Puerta de Brandeburgo, la Torre Eiffel de París, el Palacio Real de Madrid o las Cataratas Victoria en Zimbabwe.
La Hora del Planeta nació en Sidney en el 2007 y desde entonces se celebra el último sábado de marzo. En el primer año se contó con la participación de unos 2.000 comercios y 2,2 millones de personas, para alcanzar los 50 millones de participantes en 35 países al año siguiente.
Siete años después, en 2013, ciudadanos en más de 153 países de todos los continentes, incluyendo la Antártida, apagaron sus luces. “La Hora del Planeta sirve para recordar a la gente que cuando se juntan miles de millones de pequeños actos individuales es cuando surge la diferencia”, dijo el cofundador de esta iniciativa, Andy Ridley, a la agencia de noticias EFE.