El presidente Horacio Cartes mantuvo ayer una reunión con el titular del Senado francés, Gerard Larcher, para hablar sobre las negociaciones comerciales que se están impulsando entre los integrantes del Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión Europea (UE). La reunión se realizó en el Palacio de Luxemburgo.
Solicitaron que el Congreso paraguayo apruebe todas las decisiones tomadas en torno al medioambiente que necesitan ser ratificadas.
El presidente de la República se encuentra en Francia hasta donde viajó para asistir hoy en el encuentro organizado por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).
El diputado Hugo Velázquez explicó que el presidente aprovechó este diálogo para cursar una invitación al titular del Parlamento francés para visitar Paraguay.
“Estuvimos esta mañana (ayer) en una visita protocolar con el presidente del Senado y algunos senadores que forman parte de la Comisión de Amistad entre la República de Francia y Paraguay”, apuntó.
Señaló que intercambiaron los distintos aspectos que hacen referencia a la política interna del país e inclusive de la política de nuestra región, en torno al Mercosur.
Especialmente sobre la situación de Brasil en donde hubo un cambio de Gobierno tras el juicio político a Dilma Rousseff, y también hablaron sobre la crisis política que hay en Venezuela.
Velázquez mencionó que el legislador francés reconoció el papel que tuvo el Gobierno de Paraguay durante la presidencia pro témpore del bloque regional.
“También nos han solicitado que en el Congreso (de Paraguay) aprobemos todas las decisiones que se han tomado durante la visita anterior del presidente de la República a Francia, relacionadas a las cuestiones de medioambiente, que deben ser ratificadas por el Congreso paraguayo”, explicó.
Hablaron sobre el proceso de transparencia y las acciones que están impulsando en materia de combate contra la corrupción.
Paraguay tomó la decisión de acercarse a la OCDE a través de los diversos mecanismos con que cuentan, para adoptar las normativas que nos permitan incorporar las “buenas prácticas” de los países que integran este órgano, y así promover políticas que mejoren el bienestar económico.