Los socios de esta cooperativa se reunieron este miércoles frente a la sede con el fin de impedir la salida a cinco “extraños” que ingresaron a las oficinas mediante una medida cautelar sin validez, según los denunciantes.
Por medio de una auditoría del Instituto Nacional del Cooperativismo (Incoop) se detectó un faltante de G. 40.000 millones y varias irregularidades en el supermercado que funciona sobre Presidente Franco; como el pago para la compra de carne por G. 211.600.000, para su posterior venta, siendo que los interventores encontraron vacía la góndola de este producto.
Ante esto, el parlamentario llegó hasta la sede con el fin de unirse a la manifestación debido a que también perdió, con el quiebre, un total de 40 años de aportes.
Núñez despotricó contra el suboficial Carlos Ferreira, quien se desempeñaba hace unos años como presidente de la cooperativa. Dijo que él es uno de los que están dentro de las instalaciones posiblemente “quemando evidencias”, a criterio del legislador.
“Carlos Ferreira fue el que craneó hace tres años cómo robar, cómo dilapidar, cómo dejar patas para arriba una cooperativa tan emblemática con 61 años de funcionamiento”, dijo.
Añadió que uno de los interventores está vinculado al grupo que “estafó" a los ahorristas, a quien identificó como Juan Alderete, por lo que la auditoría no arrojó todos los casos irregulares que existían.
“Vamos a estar acá, cerramos con candados y cadenas para que no se escapen. Incluso la Policía está en el sitio para detenerlos una vez que deseen salir. Si los asociados me necesitan me quedaré acá", refirió.
Los socios esperan el informe final de la auditoría y la adecuada liquidación, si corresponde en caso de cierre. Pero temen que el grupo de Ferreira quiera aprovecharse de la situación una vez más, pues no descartan que proveedores fantasmas reclamen pagos.