Winehouse, que falleció con 27 años en 2011, grabó diez años antes la canción My Own Way en el estudio del productor Gil Cang en Hornsey Road, en el noreste de la capital británica, un trabajo que nunca publicó. La cantante trataba en aquella época de llamar la atención de las discográficas para firmar su primer contrato, que rubricó al fin en 2003 con el sello Island Records, filial de Universal Records.
Winehouse lanzó con esa firma los dos álbumes de estudio que publicó en vida, Frank (2003) y Back to Black (2006). Tras su muerte, causada por una intoxicación alcohólica, Universal publicó un álbum póstumo con rarezas e inéditos de la cantante, Lioness: Hidden Treasures, un disco recibido con frialdad por la crítica y el público. Tras esa acogida, la discográfica anunció que destruiría las grabaciones inacabadas de Winehouse para no empañar el legado de la artista con nuevos álbumes póstumos. EFE