El ministro de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), Luis Rojas, habló ayer sobre las operaciones que realizan algunos paraguayos en busca de blanquear dinero que es producto del narcotráfico y otros delitos conexos, como el lavado de dinero.
El secretario de Estado señaló que “Panamá, Ciudad del Este y Montevideo forman el triángulo del movimiento financiero en negro”.
Rojas hizo estas declaraciones al ser consultado sobre la filtración de documentos confidenciales en cuentas offshore. Reveló cómo personas adineradas de todo el mundo, incluyendo a Paraguay, usan los famosos “paraísos fiscales” para ocultar su riqueza.
En Panamá opera el estudio de abogados Mossack Fonseca & Co, uno de los actores principales en el negocio de creación de firmas offshore (empresas creadas en centros financieros con nivel tributario bajo y sociedades fantasmas, conocido más bien como paraísos financieros).
“Se maneja esta información en los últimos tiempos y por eso es que la semana pasada, o antepasada creo, Paraguay firmó un acuerdo con Panamá, en la Cancillería, para seguir en la lucha contra el narcotráfico y demás delitos conexos. Panamá es clave”, recordó.
Rojas señaló que la gente confunde y cree que el lavado es solo parte del narcotráfico. Es también parte del contrabando, subrayó.
“Los bancos operan de manera blanca y negra. El lavado se mete en lo que son las operaciones. Parte de su dinero lo guardan en blanco y la otra parte en negro”, explicó.
Recalcó que el narcotráfico es un negocio que busca ganar dinero y la forma más competente es inyectar al sistema financiero para blanquear el dinero malhabido.
“Lo mismo ocurre con el contrabando (...) Paramá es un centro financiero importante. Ahí algunos se prestan para el blanqueo del capital. Hay personas físicas que se dedican al movimiento, no solo empresas. Es un proceso muy sofisticado ahora lo del lavado”, sentenció.
Aseveró que generalmente los sospechados de narcotráfico terminan condenados por lavado de dinero.
Nicolás Leoz. Los archivos filtrados ayer de las operaciones en Panamá refuerzan la investigación de los acuerdos de transmisión de eventos deportivos con la Conmebol, que las autoridades de EE.UU. calificaron como sobornos.
El ex presidente de la Confederación, Nicolás Leoz, y su ex secretario general, Eduardo Deluca, son los principales acusados.
Uno de los acuerdos daba cuenta de un acuerdo de USD 97 millones por los derechos de transmisión de los campeonatos de la Copa Libertadores entre 2008 y 2018.
De acuerdo con los autos de procesamiento, el empresario aseguró los derechos de difusión “mediante el pago de sobornos anuales de seis cifras a Leoz, Deluca y otros funcionarios de la Conmebol a lo largo de un período de varios años”.