Sin embargo, a partir de mañana lunes, oficialmente la cartera estatal estará dando la orden de inicio de esta obra a la empresa española Corsan Corviam Construcción SA, que tiene el desafío de terminar en un año esta obra, es decir, el 14 de diciembre de 2016, como exige el contrato con el MOPC. El costo de la obra es de G. 124.216 millones (unos USD 24 millones al cambio actual). Así informó el Ing. Ignacio Gómez, director de vialidad del MOPC.
El MOPC se encontraba trabajando en la elaboración de un Plan de Acción Socio Ambiental (PASA), que tiene como objetivo gestionar acciones para minimizar los impactos socioambientales más significativos, susceptibles de ser generados durante la etapa constructiva del nuevo paso a desnivel.
Este trabajo se realiza a través de la Dirección de Gestión Socio Ambiental de la institución, conjuntamente con la empresa Contratista, Corsan Corviam Construcción SA. Según un informe brindado por la citada dirección del MOPC, se han diseñado lineamientos sociales para la mitigación de impactos, entre los que se prevé acciones específicas para vecinos, frentistas, taxistas, vendedores ambulantes.
Con relación a los afectados directos (frentistas), se desarrollan las acciones en el marco de la Ley de Expropiaciones, previéndose las compensaciones contempladas en dicho marco jurídico, es decir; se realiza el catastro y avalúo de las afectaciones tanto de terreno como de mejoras, y en base a ello se está negociando con los 11 propietarios, así como con los cuatro ocupantes precarios para contemplar compensaciones por sus tierras y mejoras.