Decenas de estudiantes firmaron una “carta abierta” al fiscal del Caso Curuguatyen la que le solicitan su renuncia a la cátedra de Derecho Agrario, por hallarse en una grave situación de contradicción entre su labor docente y su actuación como fiscal, tanto en el plano académico como en el caso judicial “dado su pésimo desempeño como agente del Ministerio Público”.
“Hará usted un acto de bien y de justicia si reconoce esta situación y da un paso al costado, tanto en el ámbito académico como en el caso judicial del cual es objeto esta carta”, destaca el documento.
No obstante, los estudiantes en un segundo punto resaltan que es “altamente probable” que Rachid no cumpla con el pedido, por lo que requieren a las autoridades de la alta casa de estudios que aparten de su cargo al abogado Rachid.
“Esta solicitud la hacemos dado que uno de los propósitos de la Universidad Católica es la formación integral del estudiantado; tanto académica y profesional, como ética. Creemos que la persona mencionada no cumple ninguno de estos requisitos por todo lo expuesto anteriormente, lo que redundará en perjuicio de la formación del estudiantado de la Universidad Católica. Vale, y es justo, recordar que es en esta donde proponen enseñarnos la Doctrina Social de la Iglesia, la cual habla de principios para accionar frente a la realidad social y la opción por los pobres; ¿de qué sirve la prédica si no está apoyada por ejemplos concretos? El conocimiento no aplicado a la realidad, es un conocimiento muerto”, destacan.
En puntos previos, los estudiantes recuerdan a Rachid que la cátedra que dicta es sensible dada las diversas situaciones sociales que afectan a nuestra desprotegida población campesina. "¿Puede un fiscal que claramente persigue sin mayor evidencia a campesinos transmitir conocimientos de forma idónea sobre la realidad de hecho y derecho rural de nuestro país?”, se cuestionan.
Además recuerdan a Rachid supuestos lazos de amistad y política entre su familia y la de Blas N. Riquelme, una de las partes del caso.
"¿Cómo puede usted llevar el caso dada esta incompatibilidad que no solo es grosera por el caso en sí mismo, sino también porque las familias Riquelme y Rachid formaron parte del anillo de poder político y económico durante la dictadura? Nadie es responsable por la cuna donde nace, pero usted se reafirma en el papel de su padre en la dictadura al avalar esta situación de complicidad entre familias de poder que no hace otra cosa que traer al presente una dictadura que parece resistir irse”, apuntan.
Finalmente exponen que la Universidad no es un compartimiento estanco que vive de forma aislada de la realidad social. “La Universidad a través de sus autoridades, funcionarios, docentes y estudiantes deben debatir la realidad social desde cada carrera para lograr la articulación entre la formación de conocimiento y la aplicación efectiva de ese conocimiento en la construcción de una sociedad mejor. Todo esto, por supuesto, en un ámbito de consenso y disenso democrático con pluralidad de ideas y pensamientos. Ese es el compromiso que esperamos de la Universidad en todos sus estamentos”, concluye la carta firmada por al menos 37 estudiantes hasta el momento.