“Presidente, usted es un mentiroso. Viola la Constitución. Deshonra la República y la bandera”, le reclamó a viva voz, y sentenció que no disminuyó la pobreza.
En el momento en que el mandatario comenzó a cambiar la cara ante la sorpresa de la reacción de la senadora, se escuchó un abucheo generalizado de los presentes.
Cartes se sintió respaldado y comenzó a sonreír pícaramente al igual que todo su séquito, ubicado detrás de él en la Bicameral.
Silbidos y un griterío invadieron la sala que provenían de todos los presentes, y Masi optó por retirarse. “Es un honor que me abucheen los cartistas”, escribió luego la legisladora en su cuenta en el Twitter. Agregó que “a los mentirosos hay que decirles las cosas en la cara”.
Masi, su colega el liberal Carlos Amarilla por el Senado, y la diputada Olga Ferreira de López fueron los únicos disidentes que se presentaron para el informe.
En su mayoría, tanto la bancada liberal y la colorada que responden a la disidencia decidieron no presentarse.
Fernando Lugo, quien se inauguraba como presidente del Congreso y a partir de ayer inició su gestión, a pesar de la judicialización de los disidentes, solamente repitió varias veces: “por favor”, al auditorio para que vuelva la calma.
Ínterin, desde el fondo de la sala, una mujer no identificada le gritó a Masi: “Tu marido es un corrupto también”, con referencia a Rafael Filizzola. Este último está procesado por la supuesta adquisición irregular de helicópteros durante su gestión como ministro del Interior, justamente en la era de Lugo.
Inmediatamente, Lugo levantó la sesión.