A pesar de la llovizna y el frío, el equipo comandando por Ruiz logró completar la instalación del retablo en el predio de Ñu Guasu, donde el Sumo Pontífice realizará su misa central el día domingo 12 de julio.
Los meses de trabajo intenso finalmente dieron sus frutos ya que la obra de arte que impresionó hasta a los jerarcas de la Iglesia católica paraguaya se encuentra lista para ser apreciada por los ojos del mundo.
“Más de la mitad está con gripe, pero todos estamos medicados y haciendo un arduo trabajo porque vale la pena, esto es histórico para nosotros”, señaló Koki Ruiz en entrevista con Telefuturo.
Los detalles finales consistieron en la ornamentación de los arcos que recubren las imágenes de San Ignacio de Loyola y San Francisco de Asís.
Para la realización del retablo fueron utilizadas 25.000 espigas de maíz, 1.000 calabazas y 200.000 cocos en los que una gran cantidad de personas estamparon mensajes y deseos para el Sumo Pontífice.