25 nov. 2024

asteroide

Un pulso de rayos X generado por una explosión nuclear podría vaporizar la superficie de un asteroide y, con ello, cambiar su trayectoria, según una prueba de laboratorio, lo que sugiere que esta tecnología podría utilizarse en futuras misiones de defensa planetaria.
La NASA confirmó este martes que el impacto de su nave DART contra la superficie del asteroide Dimorphos, ubicado a unos 11 millones de kilómetros de la Tierra, consiguió desviar su trayectoria, tal y como era su objetivo.
¿Si un asteroide viniera contra la Tierra podríamos desviarlo? Eso es lo que intentará probar, este lunes, la sonda DART estrellándose contra uno. El astrofísico español Josep María Trigo-Rodríguez, que forma parte del equipo científico de la misión, cuenta sus claves.
Desde que en 1981 se publicó la teoría que explica cómo desaparecieron los dinosaurios, la humanidad tiene tan claro el peligro que representan los meteoritos que la NASA ensaya estos días si puede desviarlos.
La NASA lanzó una nave espacial que tiene previsto impactar deliberadamente con un asteroide en otoño de 2022 para desviar su órbita, en una misión de prueba que no tiene precedentes y que forma parte de la estrategia de defensa planetaria de la agencia estadounidense.
Cerca de la Tierra orbita el asteroide Kamo’oalewa, que es poco conocido, aunque podría tratarse de una especie de Luna en miniatura, un fragmento perdido de nuestro satélite natural, señala un estudio publicado por Nature Communications Earth and Environment.
En menos de un año, una nave espacial de la NASA se estrellará deliberadamente contra un asteroide para desviar su trayectoria. Descrita como una “defensa planetaria”, esta misión debería preparar a la humanidad en caso de una amenaza de impacto.