La ministra del Interior del Reino Unido, Suella Braverman, planea enviar inmigrantes a países de América del Sur, entre ellos Paraguay, según publicó este lunes el medio británico Express.co.uk
Recientemente, la secretaria de Estado protagonizó un nuevo escándalo, al calificar a los inmigrantes como invasores, además de pedir detener la llegada de inmigrantes. Fue calificada como xenófoba por estas expresiones.
La publicación periodística señala que la ministra impulsa conversaciones con Paraguay como alternativa a Ruanda para la deportación de personas que ingresan ilegalmente al país europeo, las cuales se encuentran en etapas más avanzadas.
El acuerdo de deportación de Ruanda se retrasó después de que varios abogados activistas de izquierda impugnaron los planes para enviar inmigrantes ilegales al país de África Oriental.
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“Se entiende que otros países posiblemente en línea para acuerdos son Perú y Belice, y hay otro país africano también en la negociación, informó el sitio web.
En lo que va del año, casi 40.000 inmigrantes realizaron la peligrosa travesía desde Francia con la ayuda de bandas delictivas organizadas para ingresar a territorio británico.
La mayoría de migrantes provienen de Irán, Afganistán, Yemen, Siria y Sudán, países en conflicto donde hay guerras y persecución política.
El sitio menciona que el costo diario para el contribuyente británico por alojarlos en hoteles es de 6,8 millones de libras esterlinas.
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Una fuente del Gobierno británico le dijo al Daily Express: “Tenemos otras conversaciones en curso, Paraguay es el más avanzado en este momento”, expuso el medio.
También sostienen que se debe romper el modelo de negocio de los traficantes de personas y solo creen que se pueda hacer si las personas que ingresan al país entienden que su destino final no será Gran Bretaña.
Debido a problemas legales, los británicos no podrán hacer deportaciones a Ruanda hasta el próximo año y los acuerdos con diferentes países significarán que se tendrán que hacer nuevos desafíos legales si los activistas quieren detener los vuelos.
La fuente expuso: “Obviamente, Paraguay es un país diferente con condiciones diferentes y un historial de derechos humanos diferente”(…). “Debería ser más difícil desafiar los vuelos allí”.
El medio inglés expone que la medida fue bien recibida por los parlamentarios conservadores que estuvieron presionando para que se tomen medidas, incluso, advirtieron que si no se toman medidas podrían perder sus escaños.
“Esta es una idea excelente. Deberíamos tratar de hacer tantos tratos con tantos países como podamos y hacer que estos aviones despeguen”, expresó el parlamentario de Stoke on Trent North, Jonathan Gullis.
La ministra de Interior explicó recientemente que este año llegaron a las costas británicas cerca de 40.000 inmigrantes, más del doble que en el mismo periodo del año pasado, y destacó el incremento de personas de nacionalidad albanesa que tratan de alcanzar el Reino Unido desde las costas francesas.
“Las personas que llegan aquí ilegalmente desde países seguros no son bienvenidas y no deberían aspirar a quedarse”, manifestó Braverman en una comparecencia en la Cámara de los Comunes, tachando de “inaceptable” el coste económico de alojar en hoteles a miles de inmigrantes mientras se tramitan sus casos, como se ha hecho hasta ahora ante la falta de plazas en centros migratorios.
Finalmente, pidió que se deje de fingir de que todos los que llegan al país británico son refugiados en apuros, por lo que busca vías para detener “la invasión”.