El documento del Gobierno indica que la pobreza total alcanzó a 1.921.721 personas el año pasado, lo que representa el 26,9% de la población paraguaya. Este indicador creció ferozmente en la pandemia, considerando que al cierre del 2019 se ubicaba en el 23,5%. En este sentido, el reporte indica al cierre del año pasado se registraron 264.590 nuevos pobres.
La mayor parte de los pobres se encuentra en zonas urbanas, con un total de 1.017.185; mientras que en las rurales están 904.536 personas; aunque el crecimiento principal se dio en la primera (ver fotografía).
El INE considera pobres a quienes tienen ingresos mensuales menores a G. 712.618 en zonas urbanas y menores a G. 506.201 en las rurales. Este dinero cubriría al menos el costo de la canasta básica de consumo.
Extremos. El documento oficial indica, en contrapartida, que la pobreza extrema disminuyó en 2020, alcanzando el 3,9% de la población. En 2019, este indicador estaba en el 4%.
Esta mejoría se traduce en que 4.419 personas abandonaron esta categoría, pese a la pandemia, principalmente en el área rural. La pobreza extrema alcanza a quienes tuvieron ingresos mensuales menores a G. 272.067 en zonas urbanas y G. 248.461 en zonas rurales, no pudiendo cubrir ni siquiera el costo de una canasta básica de alimentos.
“El incremento de 3,4 puntos en la pobreza total es significativa, podemos asegurar que la incidencia de pobreza creció en Paraguay (…) La pobreza extrema tuvo leve disminución, pero podríamos decir que no mostró variación prácticamente”, expresó Medina.
El informe lanzado en la víspera por el INE se basó en el levantamiento de datos realizado entre enero y diciembre. El tamaño de la muestra fue de 4.000 hogares en los primeros tres trimestres y de 6.000 viviendas en el último trimestre, aunque los datos de pobreza corresponden solamente al cuarto trimestre del 2020.
Aumento. Las estadísticas oficiales muestran que los índices de pobreza paraguaya crecieron producto del Covid-19.
Transferencias hicieron que el panorama sea menos grave
De acuerdo con el documento presentado ayer por el Gobierno, las transferencias monetarias adicionales que implementó el Equipo Económico Nacional el año pasado aplacaron el impacto de la pandemia en los índices de pobreza.
El reporte muestra que sin los desembolsos adicionales por Tekoporã, pensión para adultos mayores y Pytyvõ, la pobreza total se dispararía de 26,9% al 30,1%, lo que implica que cerca de 233.000 personas evitaron caer en este rango.
Con respecto a la pobreza extrema, el informe da cuenta que estos tres programas de subsidios impidieron que caigan en este indicador unas 183.936 personas.