Según el precandidato a la presidencia de la República, Santiago Peña, la mayoría de los estudiantes de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) son personas de un acomodado nivel económico.
El mismo había manifestado que son todos egresados de colegios privados y que, por ende, pueden costear aranceles más altos en la UNA. También dijo que estos tienen que darle lugar “a los pobres” en la educación pública.
Pero estas expresiones se contraponen con el último informe socioeconómico publicado por el Rectorado de la UNA sobre los ingresantes del 2016.
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A través de las encuestas se pudo observar que el 45,9% de los estudiantes pertenece a un nivel socioeconómico medio-bajo, el 24,6% a un nivel bajo, un 23% al nivel medio y solo el 6,6% al nivel medio-alto. No existen datos de alumnos que pertenezcan a un nivel de vida alto en la UNA.
Otro dato interesante es que el 52,08% de los alumnos culminaron el bachillerato en colegios públicos, el 31,05% en colegios privados y el 12,85 en instituciones parcialmente subvencionadas.