Desde entonces, la mujer, a través de sus respresentantes legales, siguió litigando pero desde la clandestinidad.
Marcos Estigarribia, uno de sus abogados, justificó la ausencia de su clienta, afirmando que no existen garantías para que se ponga a disposición.
El representante legal defiende la teoría que el caso que devino en un escándalo mediático fue fraguado para perjudicar a López, de quien asegura que actuó de buena fe.
El 13 de marzo, pocos días después de la orden de captura, se realizaron allanamientos en propiedades de la empresaria, en Asunción y Lambaré, respectivamente.
Si bien, los procedimientos se hicieron de forma simultánea y sorpresiva, no encontraron a López en ninguno de los dos lugares.
Los intervinientes se incautaron de una caja fuerte, documentos varios y más de seis mil pelotas impregnadas con el rostro de Ronaldinho.
La mujer, primeramente, se excusó de participar en la audiencia de imposición de medidas, alegando que sufría enfermedades que la hacían vulnerable a adquirir el Covid-19.
Los agentes fiscales que están a cargo de la investigación, reiteraron el pedido de búsqueda y captura de la empresaria a la Comandancia de la Policía, pero hasta ahora, no hay resultados.
Dalia está imputada por producción mediata y uso de documentos públicos de contenido falso y asociación criminal.
El mes que viene vence el plazo para que los fiscales presenten o no acusación en este caso.