El último monitoreo llevado a cabo durante el año lectivo 2022 por la Fundación Paraguay Ciberseguro da cuenta de que cada vez a más temprana edad los niños acceden a material inapropiado, no apto para su edad, en internet.
“Desde febrero a octubre pasado se redujo la edad de contacto con pornografía y violencia digital de 11 a 9 años”, revela Miguel Ángel Gaspar, director de Ciberpadres Latinoamérica.
El especialista en Riesgo Cibernético desde hace unos años viene capacitando a profesionales sicólogos, sicopedagogos, así como a padres y docentes en ciberseguridad y convivencia digital, mediante un convenio con el Ministerio de Educación y Ciencias.
“Para octubre del año pasado, los chicos de nueve años en las escuelas ya tenían acceso a material pornográfico, a material violento, tenían conductas violentas, jugaban juegos violentos que no eran para su edad”, advierte.
IMPOSTERGABLE. De ahí que, en palabras de Gaspar, adquiere más relevancia todavía poner en marcha un registro sobre salud digital infantil que está estrechamente vinculado a la salud mental.
El experto resalta que se requiere de un relevamiento de datos y casos a nivel nacional eso para “poder cuantificarlo” y así diseñar “políticas urgentes e importantes”.
Y sobre este aspecto impostergable, el experto reseña cuanto sigue: “Los últimos datos de salud mental infantil en Paraguay son del 2015; entonces, estamos desfasados”.
Durante todo el 2022 –comenta Gaspar– trabajaron con el MEC, el Ministerio de la Niñez y la Adolescencia (Minna) sobre un instrumento que permita realizar un relevamiento de datos sobre la situación de los niños, jóvenes y las nuevas tecnologías.
Es así que como se prevé, una vez que se inicie el año lectivo escolar, poner en marcha un registro sobre salud digital infantil mediante una encuesta a nivel país.
ABANICOS DE MALES. Esperan que los resultados de ese trabajo contribuyan a que se tomen políticas públicas para contrarrestar la ciberadicción y la violencia digital.
“El nivel de adicción es grande. Encontramos, incluso, casos de maltrato filioparental que es cuando los hijos maltratan a los padres y siempre fue por causa de límites en los juegos, en internet, en la conexión, etc.”, enumera.
En el marco del acuerdo con el MEC, cuenta que el año pasado llegaron a casi 200 instituciones educativas, públicas, privadas y religiosas.
“Durante todo el año de trabajo, detectamos problemas muy graves, como los de comportamiento, trastornos en el aprendizaje, problemas cognitivos, de violencia digital y física, maltratos, abusos, de ciberdelincuentes cada vez más cerca de los niños, de redes de pedófilos y de pederastas que tenían la mirada puesta en los niños paraguayos”, repasa.
Por tanto, es imperioso –dice– que el eventual establecimiento de un registro sobre salud digital infantil “trascienda los gobiernos”, con el fin de “poder documentar toda esta situación” con dicho relevamiento de datos que “va a permitir que este gobierno o los gobiernos siguientes puedan tomar medidas efectivas en cuanto a contenido digital para las escuelas”, subraya.
El nivel de adicción es grande. Encontramos, casos de maltrato filioparental, que es cuando los hijos maltratan a los padres, y siempre fue por causa de límites en juegos, internet, conexión. Miguel Ángel Gaspar, experto en ciberseguridad.
Sugieren enseñar ciberseguridad desde el preescolar
A la luz del temprano acceso al ciberespacio, plantean incluir en la malla curricular de la educación inicial y básica el tema de seguridad digital. “Tenemos que empezar a enseñar ciberseguridad desde el preescolar; tenemos que formar a los padres, a los sicólogos, a los sicopedagogos no es una cosa que pasa una materia y ya está, tiene que haber una formación continua de todos para hacer un uso correcto”, manifiesta el director de Ciberpadres Latinoamérica, Miguel Ángel Gaspar.
Sobre todo, dice, se debe trabajar también para que el Paraguay “pueda tener una red de fibra óptica nacional que funcione en todo el país; que haya internet con propósitos en las escuelas, donde los chicos puedan encontrar herramientas útiles y no que pasen tonteando todo el tiempo en las redes subido a los mensajeros o volviéndose ciberadictos”.
Gaspar recuerda que el año pasado la OMS declaró en el compendio de enfermedades que la adicción a los videojuegos es un problema de salud mental. “Entonces, hoy no podemos estar ajenos a esto, sobre todo en niñez y adolescencia. Tenemos que hacerles entender a los docentes, sicólogos, sicopedagogos y padres que estamos tratando con un problema de salud mental en cuanto a niños y adolescentes”, lanza.
Respecto al registro sobre salud digital infantil, señala que no solo será positivo por la recolección de datos en sí, sino que “servirá para sentar las bases para muchos temas que hoy estamos tratando empíricamente”, remata.
