En lo que respecta a los importadores, Petropar lidera los volúmenes con 229.303.838 litros de gasoil y 149.041.648 litros de naftas. En segundo lugar se ubica Shell, cuyas importaciones en este periodo llegan a 202.310.449 litros de diésel y 110.942.926 litros de naftas, mientras que Petrobras importó 162.780.507 litros de gasoil y 82.579345 litros de naftas en lo que va del año.
En total son unas 15 las empresas cuyas importaciones están registradas por el Ministerio de Industria y Comercio (MIC).
La buena salud de las importaciones de los carburantes, a pesar de las dificultades que supone la histórica bajante del río Paraguay, obedece no solo a la demanda local, sino también a las medidas preventivas adoptadas por las empresas del rubro, que ante los pronósticos que indicaban la posibilidad de una sequía extrema decidieron aumentar los volúmenes en sus reservas.

Al mes de agosto, el 61% de los carburantes importados corresponden a diésel y 31% a naftas.
En lo que respecta a las ventas, al mes de agosto de este año, fueron comercializados 156,9 millones de litros de gasoil y 121,66 millones de litros de naftas.
Las mayores ventas como importador las obtuvo Shell con 221,3 millones de litros de gasoil y 125,7 millones de litros de naftas, mientras que Petropar con 174,6 millones de litros de gasoil y 169,7 millones de litros de naftas. Por su parte, Petrobras comercializó 148,8 millones de litros de diésel y 109,5 millones de litros de naftas.
Venta minorista. Copetrol sigue liderando la cantidad de estaciones de servicios distribuidas en el país, con 413 servicentros. Shell cuenta con 378 estaciones, mientras que Petropar opera con 269.
Petrobras cuenta con 253 estaciones, Puma con 186, Petrosur 158, Petrochaco122, Compasa, 116 y Petromax 110. El resto de los servicentros se distribuyen entre los demás emblemas.
Solo en el Departamento Central existen 749 estaciones, mientras que en Alto Paraná hay 357 y en Caaguazú 253. En total, existen unas 2.800 estaciones de servicio en todo el país.
Garantizan provisión
Juan Paredes, director de Combustibles del Ministerio de Industria y Comercio (MIC), dijo recientemente a ÚH que a pesar de la bajante las importaciones seguían su curso.
El funcionario del MIC explicó que es improbable que la bajante histórica del río Paraguay derive en un desabastecimiento de combustibles, ya que las empresas importadoras tomaron previsiones en sus compras.
“Tenemos una buena cantidad de combustibles en los tanques. Las empresas fueron tomando sus previsiones y realizando compras. Hemos conversado con las empresas grandes y técnicamente un desabastecimiento no va a haber”, añadió.
BAJANTE SIGUE
El hidrómetro del río Paraguay en el puerto de Asunción amaneció ayer con 7 centímetros menos que ayer, alcanzando un registro de -1,24 metros.
Esto marca un nuevo récord histórico de bajante en 120 años de medición.
Debido a la condición crítica del río, existen tramos que ya no son aptos para la navegación, como el trayecto entre Asunción y Concepción.
Desde Asunción hasta el puerto de Pilar, que es el tramo donde se mueve principalmente el comercio exterior paraguayo, se puede todavía navegar gracias a los trabajos de dragado, aunque reduciendo al 70% la capacidad de carga de los contenedores.
La reducción de las cargas y las demoras hacen que el precio del flete se dispare. Se estima que de seguir esta situación sería inevitable que los precios de varios productos importados sufran un incremento de al menos un 5%, según los importadores.