Tras una audiencia reservada, un Juzgado de Cartagena dictó sentencia contra dos de los últimos acusados por el crimen del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, en Colombia. Se trata de los hermanos Pérez Hoyos, quienes pasarán más de 25 años en prisión.
Tanto Andrés Felipe Pérez Hoyos como Ramón Emilio Pérez Hoyos fueron sentenciados por la Justicia colombiana a 306,9 meses de prisión (25 años y 6 meses), por haber ordenado y pagado para acabar con la vida del fiscal contra el Crimen Organizado. La condena fue por considerarles estructuradores y financiadores a ambos. Ambos habían reconocido los hechos y los cargos.
Esto se da a tan solo una semana de que se cumpla el primer aniversario del asesinato.
Estas nuevas condenas se suman a las cuatro primeras dictadas contra el sicario y sus cómplices, en junio del año pasado.
Se trata de la condena de 23 años y 6 meses contra Wendre Still Scott, venezolano, quien efectuó el disparo; Eiverson Adrián Arrieta Zabaleta, el conductor de los asesinos, y Marisol Londoño Bedoya y Cristian Camilo Monsalve Londoño (madre e hijo), ambos cómplices del hecho, ya que se encargaron de hacer el seguimiento al fiscal y a su esposa durante su estadía en la isla Baru, en Cartagena de Indias, Colombia.
LOS RESTANTES. Actualmente solo quedan dos procesados, quienes deben todavía enfrentar a la Justicia.
Primeramente está Francisco Luis Correa, el que organizó y contrató a los sicarios. Tiene su audiencia el 17 de agosto de este año, donde se sabría si tiene o no un perdón parcial o total por haber colaborado con la Fiscalía.
Por otra parte, Margaret Lizeth Chacón Zúñiga, la esposa de Andrés Pérez Hoyos, tiene juicio pendiente, ya que no aceptó los cargos por los cuales se la acusa y enfrentará el proceso normal.
Al respecto, el abogado de la familia Pecci en Colombia, Francisco Bernate, comentó que también está pendiente el proceso de Gabriel Carlos Luis Salinas, quien está detenido en Venezuela y será juzgado por la Justicia de ese país.
También recordó que siguen las investigaciones para dar con el o los responsables de este crimen (el o los autores morales).
EN SU LUNA DE MIEL. El 10 de mayo del año pasado, el fiscal antidrogas se encontraba disfrutando de las últimas horas de su luna de miel junto a su esposa en la isla Barú, Colombia. Solo minutos antes habían anunciado que estaban esperando un hijo.
Sin embargo, esta felicidad duró poco.
Casi siendo el mediodía saltó la noticia de que lo habían asesinado, hecho que conmocionó a todo el país y el mundo.