El 18 de agosto del 2024, a eso de las 05:41, Lage le envió supuestamente un mensaje a su ex esposa, con palabras groseras. Ya en la noche, él estaba manejando un Wolkswagen Saveiro y fue hasta la casa de la mujer.
Al llegar “habría realizado un par de disparos de un arma de fuego hacia el portón del domicilio, cuyos proyectiles impactaron en el vehículo que se encontraba estacionado en el estacionamiento de la casa”, dijo la fiscala Susana González en su imputación.
En la vivienda, estaba Monserrat Zubizarreta Canillas, en compañía de sus hijos menores, quienes escucharon los sonidos de los disparos.
Patricio Antonio Lage salió del lugar, pero minutos después volvió a pasar frente a la casa, y realizó otros tres disparos, para luego huir de allí, según la denuncia.
AMEDRENTAMIENTO. Días más tarde, él nuevamente se acercó a ella, cuando estaba haciendo caminata en el Parque Ñu Guasu, “existiendo una orden del Juzgado de Paz de Santísima Trinidad que le prohibía acercarse a ella”. Supuestamente este la empezó a seguir y ella tuvo que acercarse a una patrullera, ante el pánico que le generaba.
La mujer terminó haciendo cinco denuncias de supuestos desacatos de la orden de alejamiento hacia ella y con sus hijos, dentro de un radio de 500 metros.
La querella, el abogado Sebastián Quesada, dijo que el hombre “viola alegremente las medidas dispuestas por el Juzgado de Paz, amedrentando a su ex cónyuge e hijos”.