La mujer manifestó a Última Hora que las fallecidas son Aurora y Liliana, una es hija de Osvaldo Villalba y Magna Meza, mientras que la otra es hija de Liliana Villalba, todos reconocidos miembros del grupo armado del Norte.
En su escrito, Oviedo reconoció que ambas se quedaban en su casa en la ciudad de Encarnación, Departamento de Itapúa, y que vivían con la madre de Carmen Villalba, una de las líderes del EPP.
La mujer refirió que las menores tuvieron que salir del país y adoptar otra nacionalidad (la argentina) para huir de la persecución.
Según Genoveva, las niñas estuvieron al momento del enfrentamiento porque quisieron estar con sus “perseguidos padres” para festejar un cumpleaños “y fueron asesinadas”.
Pedido. Afirmó que desean despedirse de las fallecidas y recuperar los cadáveres que “tienen mucho más valor que todos esos militares y policías que las han arrodillado y ejecutado”, sigue señalando en su escrito, donde hace un paralelismo con la historia de Héctor, en la célebre obra griega La Iliada.
“Luego hicieron pasar el tiempo para buscar una vestimenta adecuada para presentarlas ante la prensa hambrienta. No eran dirigentes ni primer anillo. No eran los cuerpos de Magna Meza ni de Liliana Villalba. ¡No!”, indica el extenso posteo de Oviedo que, según denunció, fue borrado ayer por Facebook.
Otro reclamo. Francisco Meza, hermano de Magna Meza, en una entrevista periodística, pidió ayer a las autoridades, y a la fiscala general o el fiscal del caso que si confirman la identidad de las abatidas, y que si efectivamente una es hija de su hermana, les hagan llegar el cadáver.
Dijo que es a fin de darle un digno sepelio en el cementerio del distrito 3 de Febrero de Caaguazú, donde residen sus familiares. Indicó que no reconocerían a la niña porque no la ven desde el 2004. Según ese dato, la hija de Meza tendría al menos 16 años.
Rápido sepelio. Pese a no ser identificadas aún, las abatidas fueron enterradas ayer luego de la autopsia.
Así lo confirmó el general Héctor Grau, del la FTC. Consultado por la celeridad, el militar contestó que lo hicieron por las exigencias sanitarias de la pandemia.