Sus declaraciones fueron vertidas en medio de un recorrido que realizó ayer en la zona de obras de la futura sede de la penitenciaría en la localidad de Emboscada.
Una vez más intentó justificar el acercamiento que está realizando con el cartismo y dijo que también buscará el diálogo con sectores de la oposición, porque el país necesita de gobernabilidad, más aún con el escenario de la pandemia. “No cedemos nada (al cartismo); es necesario buscar la reconciliación; las divisiones en Paraguay lo único que generan es inestabilidad, (...) la clase política tiene la obligación de construir un ambiente favorable para la reactivación económica”, sentenció el mandatario.
Insistió en que conversará con senadores y diputados de la oposición para lograr consenso y previsibilidad.
CORRUPCIÓN. El entorno de Abdo vuelve a aparecer en escándalos de supuestos casos de corrupción. Lo último complica a su ministro de Agricultura y Ganadería, Rodolfo Friedmann, quien fue denunciado por apropiarse de recursos destinados para el almuerzo escolar en la época en que era gobernador de Guairá. “Voy a mirar cuáles son las denuncias. Voy a hablar con él (Friedmann), pero no tengo a profundidad. Me voy a interiorizar”, respondió.
Sobre otros hechos que se están investigando, que no avanzan y tampoco existen sanciones, como el caso Metrobús (obra de la era cartista), el presidente respondió que está el proceso en manos de la Fiscalía.
Ese caso es una de las tantas investigaciones que nunca avanzan. “Tenemos que construir un camino sustentado sobre la verdad. La corrupción no depende del Ejecutivo, están la Fiscalía y el Poder Judicial (...), yo no le puedo meter preso a ninguno”, remarcó.
Insistió en que cada uno debe cumplir su rol y que en este periodo ya hubo cambio de cinco ministros de la Corte. Reflexionó que, por un lado, hay fuertes críticas a la cultura autoritaria, pero, por otra parte, hay sectores que consideran que el presidente de la República se tiene que involucrar en casos judiciales.
Remarcó que las instituciones deben funcionar, que hay una sociedad madura y que hay que construir un camino sustentado en la verdad.
Volviendo a defender el Operativo Cicatriz, sostuvo que la clase política debe construir un destino común porque el país necesita de un trabajo coordinado para salir de la crisis. Acotó que durante las internas partidarias marcaron diferencias con HC en su discurso de campaña y que luego terminan construyendo juntos un programa de gobierno. Insistió en la necesidad de lograr madurez política porque las decisiones que se toman terminan afectando a toda la población.
El principal cuestionamiento que tiene ahora Marito es que dio un giro a su discurso político, ya que construyó su imagen y llegó al poder cuestionando al ex presidente Cartes, con quien ahora se alió con miras a las elecciones.