Abdo Benítez aseguró que para su Gobierno representa un “enorme desafío” mantener toda la infraestructura que se está realizado en el sistema de sanitario. “Se garantiza hacer el mayor esfuerzo”, expresó.
El mandatario visitó este viernes la ciudad de Pilar, en el Departamento de Ñeembucú, desde donde se refirió sobre su polémica reacción ante la súplica de un hombre por medicamentos para su hermano, en Villarrica.
“Hay una gran manipulación con mucha maldad. Yo estaba hablando con el periodista Nino Silguero, quien es un amigo, él me dijo que había un señor que necesitaba hablar, yo me referí a él y le dije que no había problema, que no soy médico, pero que me haría cargo”, afirmó.
Abdo Benítez aseguró que sus expresiones fueron descontextualizadas. “Se sacó una parte, se inventó que le dije al señor. Esta es una enorme manipulación que duele, pero estamos acostumbrados y hay que seguir trabajando”, añadió.
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Entre lágrimas y desesperación, un taxista de Villarrica llegó hasta un acto oficial y exigió a las autoridades estatales que garanticen medicamentos gratuitos para su hermano internado en Terapia Intensiva por un cuadro de Covid-19.
Por su parte, Mario Abdo fue consultado ante la situación de Oviedo, indicando: “yo no soy médico”, al tiempo de señalar que pedirá a los encargados que asistan al hombre. “Si hay un costo, avisame. Yo voy a cubrir”, se le puede escuchar después al jefe de Estado.
La reacción del mandatario fue considerada como una falta de sensibilidad y derivó en la indignación ciudadana en las redes sociales.
El Ministerio de Salud informó que se entregó la medicación al trabajador para dar una “solución” a la problemática, “siguiendo las indicaciones del presidente”.
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El ministro de Salud, Julio Mazzoleni, señaló que el Estado gasta G. 15 millones diarios por un paciente internado en Terapia Intensiva, pero a pesar de que el sistema público debería velar por la protección económica equitativa de las familias aquejadas por problemas de salud, miles de personas deben recurrir a los gastos catastróficos.
Recientemente, se dio el caso de una familia que gastó G. 42 millones en medicamentos e insumos hospitalarios por un allegado con Covid-19 en un hospital público. De los 29 días, 14 de ellos estuvo internado en Terapia Intensiva.