Para reforzar la cuasicomplaciente investigación de la Fiscalía a los posibles indiciados por la manipulación del acuerdo de Itaipú, firmado en mayo pasado en absoluto sigilo y en contra de los intereses nacionales, se divulgó que Joselo Rodríguez González declaró el viernes en la Fiscalía Anticorrupción que el teléfono desde el cual había enviado todos los mensajes al ingeniero Pedro Ferreira, cuando este aún era el titular de la ANDE, lo perdió.
La fiscala Liliana Alcaraz confirmó ayer que, efectivamente, el abogado que se presentó ante el presidente de la ANDE como consejero jurídico del vicepresidente Hugo Velázquez, y que era su portavoz en la negociación del acuerdo energético con el Brasil, entregó otro aparato telefónico para ser sometido a peritaje.
“Él perdió su teléfono y retiró otro el 22 de junio”, confirmó Alcaraz, uno de los tres agentes que durante ocho horas escucharon la versión del ahora personaje que saltó al ojo de la tormenta política de la semana pasada. En su declaración había dicho, de todos modos, que ya había eliminado todos los chats a través del WhatsApp con el ex titular de la ANDE.
Sin embargo, pese a la actitud hasta si se quiere divertida con que toma las circunstancias Rodríguez –que intentó negociar una venta exclusiva de energía de la ANDE a la empresa Leros del Brasil, relacionada a la familia del presidente brasileño Jair Bolsonaro y a la cual representa, según sus palabras–, el ingeniero Ferreira también prestó declaración testimonial y entregó todos los mensajes entre él y el abogado, a quien el propio Velázquez había presentado, declaró, como representante suyo.