La asociación Abuelas de la Plaza de Mayo, de Argentina, convocó este miércoles a una conferencia de prensa en Buenos Aires, para realizar el anuncio de la restitución de identidad para el nieto 132, informaron medios del vecino país.
“El 2022 finaliza así con la resolución de un nuevo caso que renueva las esperanzas de este camino de verdad, memoria, justicia e identidad. Esperamos que el 2023 nos reciba con muchos más encuentros”, destacaron las Abuelas.
Por el momento, la emblemática asociación, integrada desde 1977 por ancianas que buscan a sus nietos, hijos de desaparecidos que fueron apropiados por la dictadura militar en Argentina y entregados a familias ajenas, no dio más detalles, y emplazó a una rueda de prensa que se celebrará este jueves, a las 18:00 hora local (21:00 GMT).
La asociación presidida por Estela de Carlotto estima que cerca de 500 bebés fueron robados por la dictadura a sus progenitores, en su mayoría opositores al régimen, y en muchos casos a madres que dieron a luz en centros clandestinos de detención y tortura y fueron desaparecidas para siempre, asesinadas o tiradas con vida, drogadas, al mar.
Según organismos de derechos humanos, el terrorismo de Estado hizo desaparecer a cerca de 30.000 personas.
A mediados de la década de 1980, las Abuelas impulsaron la creación de un banco para almacenar sus perfiles genéticos y garantizar la identificación de sus nietos.
En 1987, el Congreso creó por ley el Banco Nacional de Datos Genéticos, que desde entonces se encarga de resolver la filiación de los niños apropiados durante la última dictadura.
En todo este tiempo, el banco ha ido sumando técnicas avanzadas de identificación genética y forense y en el 2009 se sancionó una nueva ley que jerarquizó a la institución.
La penúltima vez que Abuelas de Plaza de Mayo anunció la restitución de identidad de un bebé robado fue el 13 de junio de 2019, cuando la organización presentó públicamente a Javier Matías Darroux, de 41 años, como nieto 130.