Se pudo corroborar, que el de 16 de agosto del 2023, en horas de la mañana, supuestamente la actuaria ingresó a través de su usuario en el sistema del Poder Judicial, reemplazando la causa de testimonio falso por “Arnaldo Joel Duré sobre estafa”.
Ese día, su inicio y cierre de sesión en la red coincidieron con la marcación de entrada y salida de la funcionaria, según datos de la Dirección General de Tecnología de la Información de la Corte.
Según la Fiscalía, Romero “se aprovechó –sin contar con autorización alguna– de las atribuciones que le fueran concedidas” de modificar datos del caso, como la información general, objeto de la causa, movimientos, y también modificar datos de las partes y el número del expediente.
Con el cambio, permitió que la causa no aparezca en el sistema y se extravió “digitalmente el expediente judicial”.
También “se logró que no se registrara en el sistema informático correspondiente a Antecedentes Penales del Poder Judicial”, dice la acusación.
COMPROBACIONES. Romero era dependiente del Tribunal de Sentencias a cargo del juez Darío Báez, donde ocurrió el hecho.
Aparte de ella, otra funcionaria identificada como Ela Adriana Sánchez, también estaba asignada a los trámites de las causas. En principio era esta quien tenía el expediente de González Daher a su cargo; sin embargo, “por pedido de la propia actuaria Juliana Romero”, se le asignó a ella.
Fue el 8 de agosto del 2023 que la hoy acusada recepcionó la causa con los cuatro tomos. Sin embargo, Romero nunca asentó en el cuaderno de entrada el ingreso. También, se percataron que el expediente consignaba un faltante de 30 fojas de uno de los tomos, “cuya observación no fue asentada por la actuaria”. Además se detectaron otros errores.
La fiscala, en su acusación, hizo constar que “Juliana posee vasto conocimientos relativos al sistema Judisoft, puesto que prohibía que sus compañeros se compartan las claves de acceso, y tampoco permitía que entre los mismos se impriman documentos con otros usuarios que no fueran los propios.
La denunciante del caso fue la propia actuaria hoy procesada, luego de que sus compañeros se percataran de que la causa no aparecía. Ella dijo que personas extrañas utilizaron su usuario y contraseña, “pretendiendo hacer creer al órgano fiscal que fue un tercero el responsable”, dice la carpeta fiscal.