La Cámara Paraguaya de la Industria de la Construcción (Capaco), dirigida por José Luis Heisecke, y la Cámara Vial Paraguaya (Cavialpa), al mando de Paul Sarubbi, emitieron ayer un comunicado conjunto en el cual “rechazan el manejo informal de situaciones delicadas”.
Ese comunicado surge en una alusión indirecta a los recientes escándalos en licitaciones públicas dados dentro de la cartera de obras, como el caso de la pasarela de ñandutí de USD 2 millones, que involucra a la firma Engineering SA, la cual sería supuestamente favorecida en las licitaciones por sus vínculos con la familia presidencial, y las recientes denuncias de empresarios de EDB y Vial Agro, que mostraron su oposición a los procesos de adjudicación.
APOYO. Los gremios viales y de la construcción defendieron la “apuesta histórica que viene realizando el Gobierno Nacional en el mejoramiento de la infraestructura”.
“El sistema de trabajo entre las empresas constructoras y el MOPC se ha venido perfeccionando en las dos últimas administraciones, y se apoya en la competencia en calidad y precio”, señalaron los gremios en el comunicado.
Sin embargo, Capaco y Cavialpa reconocen las falencias en los procesos licitatorios y sostienen que “todo sistema es perfectible”, y por ello, “vienen trabajando con ese fin en el marco del diálogo y el respeto”. Los empresarios del sector también apoyan las investigaciones de las denuncias hechas en las últimas semanas sobre procesos licitatorios entre el MOPC y las firmas constructoras, pero piden que estas se realicen en el marco del debido respeto.
“La investigación de denuncias fundamentadas, así como la sanción de irregularidades cuando estas han sido debidamente comprobadas, forman parte de este proceso”, manifestaron. Los gremios confían en el “fortalecimiento de las instituciones” y solicitan “la intervención efectiva de los organismos encargados de velar por el irrestricto cumplimiento de las leyes”.
Por otra parte, exhortan a que “la inversión en obra pública no solo continúe, sino que se incremente” y hacen un llamado a “priorizar el bien del Paraguay por encima de los intereses particulares”.
Recordaron que el 2020, marcado por la pandemia del Covid-19, generó una crisis económica, cuyo impacto no fue tan fuerte en el sector gracias a la inversión pública de poco más de USD 1.000 millones en la construcción.
CIFRAS. Según datos del MOPC, en el periodo de agosto de 2018 a agosto de 2020, la firma Tocsa recibió adjudicaciones por valor de USD 247 millones, el mayor monto dado por la cartera en la gestión de Mario Abdo Benítez.
Otras firmas con millonarias licitaciones en el citado periodo son Concret Mix SA, con USD 199,5 millones en contratos; Tecnoedil SA, con USD 184 millones; Ecomipa SA, con USD 169,9 millones; Constructora Heisecke SA, con USD 158 millones; CDD Construcciones SA, con USD 147,9 millones; Construpar SA, con USD 135,9 millones; Benito Roggio e Hijos SA, con USD 122,3 millones; y T&C SA, con USD 115,7 millones.