El potentado ex dirigente del Sportivo Luqueño va sumando un largo historial como presunto usurero y lavador de dinero, creando una elevada riqueza mediante préstamos cuyos intereses llegaban cerca del 100%. Sin embargo, Elena (nombre ficticio) en noviembre del 2019 declaró en una entrevista con Monumental ser víctima también de extorsiones por mensajes por parte de RGD.
¿QUÉ PASÓ DE ELLA? Una fuente cercana comentó que la mujer está viendo cómo hacer una denuncia en lo penal basado en las pruebas que tiene contra RGD (mensajes y llamadas) y que, además, está con miedo de acercarse a los medios de prensa.
La presunta víctima había caído en el enredo de préstamos de González Daher por medio de su ex marido, quien la utilizó “como mujer utensilio”. Según declaraciones, el hombre creó una cuenta corriente a nombre de ella, y le hacía firmar los cheques, dándoles movimiento. Luego “despilfarró los cheques” y presuntamente le dejó sola con deudas, que luego se volvieron en causas. Los préstamos los hicieron con RGD.
El primer préstamo fue de G. 115 millones, hecho en el 2010, que se canceló en dos pagos, pero el cheque nunca le fue devuelto. “La deuda fue cancelada, pero él –Ramón González Daher– se quedó con mi cheque y me ponía excusas para no entregarme o desaparecía”, había revelado hace unos meses.
El segundo préstamo fue pagando G. 5 millones mensuales y quedó una deuda de G. 13 millones que ya no pudo pagar a tiempo, por lo que fue nuevamente denunciada.
LAS EXTORSIONES. Elena se quedó en silencio por mucho tiempo por temor. Comentó que ya con causas abiertas en su contra comenzaron las extorsiones y acosos. Recibía mensajes de RGD en los que le pedía fotografías de sus partes íntimas, supuestamente.
Inclusive, le describía la ropa con la que ella iba a firmar cada mes en el Juzgado y la invitaba a salir.
“Como él tenía mucho poder, me callaba”, relató.
Por esta denuncia de estafa, estuvo privada de su libertad en la cárcel del Buen Pastor por tres meses, por lo cual fue sobreseída en junio de este año por la fiscala María Celeste Ocampos Ros, otorgado por la jueza María Cecilia Ocampos.
Ramón usaba el esquema de doble cobro en préstamos
De acuerdo con investigaciones, el cobro de intereses sumamente elevados no figura en las declaraciones juradas del empresario Ramón González Daher, ya que él hacía figurar el cobro de alquileres como el incremento de su activo.
Además, el empresario Ramón González Daher necesitaba del apoyo del sistema judicial, y por medio de fiscales se realizaban los aprietes a los supuestos estafadores.
Según el abogado Federico Campos López Moreira, el ex dirigente del Luqueño utiliza la Justicia Penal para acusar a deudores, siendo que las causas debían resolverse en lo Civil.
Se descubrió que existen al menos 507 denuncias promovidas por RGD en los últimos 20 años.