Resistencia. La cantidad de insumos recibidos por el Ministerio de Salud Pública para enfrentar la pandemia puede alcanzar para varias semanas.
“Con lo que tenemos ahora podemos aguantar de tres a cuatro meses”, reveló el doctor Julio Borba, director del Redes y Servicios de Salud de la cartera sanitaria. Sin embargo, este cálculo es relativo. Todo dependerá de que se siga manteniendo el ritmo actual del nivel de contagios para que dichos insumos puedan abastecer las 12 semanas, explicó Borba. El doctor Juan Carlos Portillo señaló que fueron llevados adelante diversos mecanismos para garantizar la provisión de insumos para realizar las pruebas de Covid-19. Mencionó que con lo que se tiene se puede aguantar aún alrededor de dos semanas. Eso dará tiempo para poder cerrar las gestiones para adquirir más de estos insumos para realizar el test. Portillo reveló además que el problema de la falta de los test para realizar el diagnóstico del coronavirus se produjo a consecuencia de un corte en la cadena logística. Esta situación no solo afectó a Paraguay, sino también a otros países. Refuerzos El proceso para ir reforzando el sistema de salud pública ha tenido sus altibajos. Mientras, se han sumado más camas para el área de terapia intensiva y también a las de internación común. En el caso del Ineram y el Hospital Nacional de Itauguá, con la creación de los hospitales de contingencia se sumaron 100 lugares más en cada uno de ellos. También otros centros asistenciales en diferentes partes del país sumaron nuevos lugares para los pacientes que no están en un nivel crítico. Sin embargo, el proceso de compras desde exterior de los equipos de bioseguridad y camas sí encontraron varios contratiempos en estos meses de Covid. Precios altos que convertían la compra en una feroz disputa por el quién da más, problemas para el transporte, acaparamiento de otras naciones, confiscaciones, fueron algunos de los problemas que se presentaron en este tiempo. A ello se sumó la fallida adquisición de los productos sanitarios llegados desde China a mediados y finales del mes pasado. El proceso de esta compra, que tuvo como protagonistas principales a las empresas Imedic SA y Eurotec SA, de los hermanos Ferreira, tuvo sus problemas desde el inicio. Partiendo del atraso en la llegada de los equipos de bioseguridad, lo que obligó a extender la cuarentena total, siguiendo con el rechazo del lote que llegó con la primera carga, hasta la rescisión, parcial primero y total después, de dichos productos a finales de mayo. La rescisión trajo consigo una denuncia de parte del ministro de Salud, Julio Mazzoleni, hacia las firmas de los hermanos Ferreira. El escándalo de los insumos chinos desencadenó también renuncias en el Ministerio de Salud y sumarios a funcionarios. El proceso continúa hasta ahora. A ello se sumó la cancelación de varios procesos luego de la revisión realizada por la Comisión de Compras Covid, a cargo del Ministro Arnaldo Giuzzio.
nueva amenaza a la salud
Refuerzo. Siguen llegando las donaciones que han resultado ser en gran medida la panacea.
Ventaja. Aún no se ha dado un disparo descontrolado de los casos de Coviden el país.
Donaciones han salvado situación
Ante las fallidas gestiones para adquirir los equipos de bioseguridad para el personal de salud, las donaciones desde distintos lugares lograron salvar la emergencia sanitaria. Otro hecho que ha jugado a favor ha sido la baja cantidad de contagiados hasta el momento en el país.
El propio Mazzoleni había reconocido que las contribuciones han sido mayoritariamente las que permitieron distribuir los equipos a médicos y enfermeras.
Países como China Continental, Alemania, Taiwán, entre otros, además de organizaciones privadas, particulares y binaciones se han sumado a esta contingencia.
Recientemente Turquía entregó su aporte al Ministerio de Salud Pública. La donación está valorada en un monto que bordea los USD 1.400.000.
Gafas protectoras, trajes, mascarillas NK95, guantes, entre otros fue el lote entregado para su distribución.