EFE
El estudio, realizado por un equipo de la Universidad James Cook de Australia, se centró en el desarrollo de los embriones de los tiburones jarretera (Hemiscyllium ocellatum), que generalmente pasan 3 a 4 meses dentro de los huevos antes de que se rompa el cascarón.
“En general, no se han registrado diferencias entre el crecimiento y supervivencia de los tiburones criados en las condiciones actuales frente a los criados en las condiciones de acidificación oceánica pronosticada para el 2100", dijo Jodie Rummer, una de las autores del estudio, en un comunicado.
Los investigadores tomaron una cantidad de huevos durante un mes y los dividieron en dos estanques, uno con las condiciones actuales de acidificación del mar y el otro con las previstas en 2100.
Luego contabilizaron los movimientos de las branquias y las colas de los embriones de cada grupo, así como la cantidad de yema que consumían y la tasa de crecimiento dentro de los estanques, para posteriormente estudiar si estos lograban sobrevivir.
El estudio advirtió que el riesgo de que mueran a consecuencia de la acidificación de los océanos es más alta antes de que sus branquias alcancen su desarrollo completo.
“No importa cuán fuerte parezca esta especie. Si el cambio climático destruye sus guaridas, se convertirá en una especie vulnerable como cualquier otra”,acotó Rummer.
La investigadora recordó que el aumento de las emisiones de dióxido de carbono es nociva para organismos calcificados como los corales o los huevos.
Los océanos absorben el 30 por ciento del dióxido de carbono y se pronostica que la acidificación de los océanos a consecuencia de ello aumentará en un 150 por ciento en comparación a la era preindustrial.