Carlos Aquino
BRITEZ CUÉ - CANINDEYÚ
Desde la clandestinidad, Felipe Santiago Acosta Riveros, alias Macho, negó que sea un capo narco como lo presenta la policía, pero acusó a un efectivo de Investigación de Delitos de extorsionarle permanentemente y desmintió que sus hombres hayan atacado a los efectivos policiales.
Alias Macho apuntó a un tal Valenzuela, subjefe de Investigación de Delitos, como el responsable de armar presuntamente una novela contra él para perjudicarle, porque se negó a seguir dándole dinero. “Este Valenzuela, quien estuvo en Crimen Organizado, es el cerebro de todo esto. Cuando estaba en el Departamento de Crimen Organizado me amenazó y tuve que darle 150 millones de guaraníes. Luego vino como subjefe de Investigación y me sacó otro 30 millones y después me seguía exigiendo más dinero, un monto grande a lo que ya no accedí y por eso hizo todo esto. Nunca hubo tal ataque, yo no soy un hombre violento como me presentan, vivo aquí en el monte ni para verle a mi hijita salgo más de aquí como tengo antecedentes y orden de captura. Ellos escriben cualquier cosa por mí y me acusan de todo”, explicó Acosta.
Dijo que no tiene matones ni armas y que es un trabajador como la mayoría de los pobladores de Britez Cué. “Ayudo con lo que puedo a todos, incluido a los indígenas porque esta población está abandonada por el Gobierno”, relató.
Agregó que su hermano Isabelino Acosta no tiene nada que ver con el trabajo que él realiza. “Mi hermano no está metido en nada, tiene su familia y vive con ellos, nunca se metió en nada, ahora le inventaron una orden de captura sin tener nada en su contra ", dijo, finalmente.