El Ministerio Público allanó este jueves la vivienda y formuló una nueva imputación por enriquecimiento ilícito y lavado de dinero contra Wilfrido Cáceres, ex director de Administración de la Municipalidad de Asunción; su esposa Ruth Da Silva, la secretaria Camila Ramírez Gómez y la madre de esta última.
El fiscal Silvio Corbeta indicó que la vivienda se encuentra a nombre de la secretaria, pero la misma no tiene condiciones económicas para adquirirla, como tampoco el ex jefe municipal, quien percibía un salario no superior a los G. 10 millones.
Se trata de una lujosa casa de tres pisos y, por sus características, se presume que funcionaba o se quería instalar un consultorio odontológico, además de haber sido vaciada antes del procedimiento.
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La primera mansión del ex funcionario contaba con un impresionante derroche de lujo, como un piano de cola, piscina y un hidromasaje al aire libre, además de una doble parrilla automatizada de acero inoxidable.
La mansión está ubicada en el barrio Lote Guasu de San Lorenzo y se encuentra bajo la administración de la Secretaría Nacional de Administración de Bienes Incautados y Comisados (Senabico). La vivienda también se encuentra a nombre de la secretaria Camila Ramírez.
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También se encontraron otros bienes que fueron invertidos durante el tiempo de investigación, es decir, a partir de su ingreso a la Municipalidad de Asunción. En total, se detectaron G. 5.100 millones en inversión en bienes raíces (compra de terreno, construcciones y amoblamiento de esos lugares), además de vehículos por valor de USD 60.000.
El ex funcionario fue investigado luego de un informe de la Contraloría General de la República, en donde se advertía sobre una ausencia de correspondencia de todos sus bienes declarados y los ingresos totales del matrimonio.
Cáceres fue la mano derecha del intendente Óscar Nenecho Rodríguez durante la pandemia. Ahora, el intendente también es investigado por el mal uso de unos G. 500.000 millones de bonos.