Otro detalle resaltante es que tampoco cuentan, hasta el momento, con el almuerzo, ni la merienda escolar, lo poco que llevan los docentes comparten con sus alumnos para paliar la necesidad.
Esta situación no es de ahora, ya viene sucediendo desde varios años atrás según explicaron los docentes que concurren diariamente a dicha institución educativa.
El profesor Gerardo Aquino, docente indígena de la comunidad, manifestó: “Nosotros somos los que a diario sufrimos con nuestros alumnos, por falta de energía eléctrica, las clases se están dando a oscuras, el techo se cae en pedazos, y cuando no llueve salimos en el patio para impartir las clases. Tampoco tenemos agua tratada, y esto no es de ahora, desde el 2016 ya enviamos a planificación del Ministerio de Educación y Ciencias para buscar una solución a estos serios problemas por el cual estamos atravesando y hasta el momento no nos han dado respuesta”.
Por otro lado, los docentes, que son aproximadamente 10, que van de Pedro Juan Caballero diariamente, deben cruzar en una improvisada balsa que fue construida por los propios padres.
Francisco López, director del nivel medio, destacó que desde la creciente del mes de febrero que el río Aquidabán se llevó el único puente que unía ambos ladoa; ahora deben munirse de salvavidas y así montar la balsa para enfrentar el caudaloso río hasta llegar a su institución.
La escuela y colegio funcionan juntos y concurren aproximadamente 270 alumnos en los dos turnos. MC