Las acciones de Blackberry ganaban más de 50% en Wall Street después de este anuncio.
El grupo canadiense de programas informáticos para telecomunicaciones ya se había asociado con Amazon, el líder mundial de la nube (computación a distancia), a principios de 2020.
El nuevo contrato le permitirá desarrollar, a lo largo de varios años, una plataforma denominada IVY, que facilitará a los fabricantes de automóviles “crear servicios integrados en el automóvil que mejoren la experiencia de los conductores y los pasajeros”.
“Por ejemplo, IVY podrá utilizar los datos del coche para identificar el comportamiento del conductor y las condiciones de peligro, como el hielo o los atascos de tráfico, y recomendar al conductor que active las opciones de seguridad como el control de tracción, la asistencia para mantener el coche en el carril o el control de velocidad”, detalla un comunicado de Amazon.
La plataforma, omnisciente, podría incluso advertir a los padres si su hijo adolescente está enviando mensajes de texto mientras conduce o supera el límite de velocidad.
En los últimos años, BlackBerry se ha diversificado hacia a los servicios empresariales: seguridad informática y centralización de datos.
Los dos grupos unirán sus fuerzas: la experiencia de BlackBerry en la recolección de datos de automoción y la de AWS (la rama de la nube de Amazon) en inteligencia artificial, es decir, objetos conectados y aprendizaje automático de máquinas.
La plataforma tendrá que responder al desafío de los complejos vehículos modernos, construidos con materiales y programas informáticos de diferentes proveedores.
“BlackBerry IVY será capaz de ejecutar múltiples sistemas operativos de vehículos y tipos de nubes para ser compatible sin importar el modelo y la marca”, dijo Amazon.
El gigante del comercio en línea y de la nube ya había invertido en vehículos autónomos.
En junio, anunció la adquisición de Zoox, una empresa especializada en la tecnología necesaria para crear una flota de taxis autónomos.