Los sectores empresariales reclaman que las autoridades nacionales tomen conciencia de la importancia de aplicar políticas concretas con el fin de erradicar los factores que ralentizan el ritmo de crecimiento nacional.
En ese orden, piden que se prioricen las cuestiones económicas en vez de actividades políticas partidarias.
La preocupación de los actores que representan gremios empresariales es que, desde mediados del año pasado –y más persistentemente durante el primer bimestre del presente– se refleja una disminución sustancial en el consumo de productos y servicios en nuestro propio mercado.
Así lo consigna Rubén Ramírez, economista y asesor de la Cámara de Anunciantes del Paraguay (CAP), pero quien también citó a la Unión Industrial Paraguaya (UIP) y a la Unión de Gremios de la Producción (UGP) como focos de la toma de conciencia en torno a los planes que debe encarar el Gobierno Nacional.
“Son elementos que deben llamar la atención a las autoridades económicas nacionales, para adoptar una serie de medidas correctivas relacionadas con mayor inversiones públicas, coordinación de políticas interinstitucionales y, sobre todo, un fortalecimiento sustantivo de las instituciones y políticas públicas, para que tengamos acciones anticíclicas y contrarrestar la ralentización de la economía”, sostiene.
A su criterio, existen debilidades estructurales en materia de infraestructura, servicio de transporte, comunicación, agua y saneamiento, lo mismo que energía eléctrica; por lo cual el ambiente necesita revitalizarse mediante inversiones genuinas.
Las consecuencias de un menor ritmo económico están traducidas –según el especialista– en la menor productividad agrícola, producto también del cambio climático; en las menores partidas y envíos de carne bovina y otros. Apunta, además, que la diversificación está asentada sobre perspectivas de crecimiento del comercio y servicios (sector privado), pero que con el menor consumo el panorama se complica.
tiempos electorales. Un elemento que puede perjudicar aún más el tono del crecimiento es que próximamente el país ingresará de nuevo en un ciclo político de elección de autoridades partidarias internas; mientras que el año venidero serán las municipales, “debe llamar la atención de las autoridades el sentido de esfuerzo para generar un fortalecimiento institucional”, enfatiza.
¿Qué factores puntuales hacen caer el consumo en el país?, le consultamos: “La crisis argentina generó una fractura en la cadena de pagos de nuestro país vecino, con la disminución del turismo hacia nuestro país; además de que dentro de nuestro sistema financiero –a través de una regulación de tasas en las tarjetas de crédito– hizo expulsar del sistema formal a muchos consumidores, ya que no se cubren los costos por parte de las empresas”, explica Ramírez.
El economista sostiene, por otra parte, que más allá de las políticas sociales es importante adoptar mecanismos de sostenibilidad económica; además de la formalización mediante la inclusión financiera y mejor distribución del ingreso. Mientras que a nivel macroeconómico, el debate sobre la reforma fiscal y tributaria es una variable que puede generar una serie de hechos imprevisibles, lo que hace pensar más de una vez a un inversor si le conviene o no inyectar capital en el país.
De igual forma, indica que los empresarios esperan señales desde el Gobierno para que las discusiones no se asienten solamente en los factores políticos, sino con más énfasis en lo económico.